El buceo es una actividad al alcance de cualquier persona, sin importar su edad o condición. Es, además, un ejercicio muy saludable y seguro si se adoptan ciertas precauciones básicas. El agua nos libera de las limitaciones de la gravedad y nos ofrece nuevas posibilidades. La modalidad de snorkel (buceo con gafas y tubo) es accesible a todo aquel que pueda nadar. Consiste, simplemente, en darse un baño observando la vida submarina, siempre conscientes de las propias limitaciones y de las condiciones del entorno. Para los más aventurados, el buceo con equipo autónomo de respiración permite acercarse más al mundo sumergido, requiriéndose para ello conocimientos y condiciones físicas específicas. El mayor peligro existente en las aguas del archipiélago es la propia imprudencia; la fauna marina canaria es amigable o, como sucede en el caso de los animales más grandes, tremendamente esquiva. |
Gran Canaria es una isla sorprendente para la práctica del buceo en cualquiera de sus modalidades, tanto si se realiza con gafas y tubo, como si se utiliza un equipo autónomo. Prácticamente, se puede bucear durante todo el año, ya que al existir interesantes posibilidades de inmersión en variados puntos alrededor de la isla, siempre se puede disponer de lugares de buceo al abrigo de las condiciones del mar y del viento. Este deporte se puede practicar utilizando una embarcación o adentrándonos en el mar desde la costa. |